La llegada a Viena fue tanto ansiada. Para tomar un reposo por un lado, para hacerle el servicio a la bicicleta, sacar mi pasaporte argentino, cerrar la etapa de los países que conocía ya y entendía su idioma y esperar que el mal tiempo se desplace para cualquier lado pero que pase.
A todo puedo hacerle ahora una tilde de “Hecho”
Paso a hacer un Fotoresumen:
En primer lugar la foto con Klaus Heinsheimer y su esposa Heidi. Con Klaus nos conocemos desde mi infancia y su adolescencia puesto que eran nuestros vecinos de la calle Yapeyú en Martínez (Buenos Aires). Me ha dado cuartel por estos días en una zona muy bonita a las afueras de Viena. Curiosamente, en mi primer biciviaje del 1999 también paré en Viena y surgió la misma foto, con algunos kilos y canas de menos. Apenas pueda, cargare la foto histórica.
Luego en Viena “Chi non muore si rivede” un nuevo encuentro con (ahora ya si) mi amigo Sergio de Madrid.
En Viena se respira aun hoy y sin duda alguna su pasado de capital imperial. Centro del poder del Sagrado Imperio Romano Germanico pero sobre todo en su arquitectura y glamour de la capital de la monarquía Austro-Ungara de los Habsburgo.
El personal consular de la Embajada Argentina en Viena se pasó de cortés y eficiente. Ya tengo mi pasaporte. Aún espero respuesta del portal del ministerio de Randazzo, explicándome que debería hacer para tramitar un pasaporte. (Escrita hace mas de 2 semanas)
Un random de imagenes de celular hechas en Viena
Mañana se parte, si la bicicleta esta lista, para Bratislava, capital de la Republica Eslovaca.
0
Dejar un comentario