Rumania, eres una reina
que el polvo del tiempo te cubrió.
Habrá opacado tu brillo de antaño,
pero sin quererlo
de la contaminación te salvó.
Tus morbidos paisajes, tu languida mirada a traves de las callejas de tus pueblos;
dormidos, desolados,
me canta al oído una canción de amor.
Encontré la velocidad justa, pedaleando por tus rutas, para descubrir tu calor.
Rumania, que el príncipe que te desvele, no te maquille, no te despeine,
solo te devuelva tu brillo y tu esplendor.A las orillas del Rio Mureš en Blandiana, 26.04.2015
Esta mañana cuando parti del pueblito de Simeria con destino la ciudad de “ALBA IULIA” cual importante ciudad Romana llamada APULUM en la provincia de la DACIA ROMANA y sede de la XIII Legión Gemina, presentía ya que iba a ser un día especial. La ruta al este del río Mures me llevaría por pueblecitos, alejado de la carretera y sin ningún estrés técnico, es decir sin trafico.
Tal cual fue también.
El mediodía me trajo ya la primer sorpresa agradable pues mientras me alejaba de mi ruta, entrando por una calle del pueblo “Bacainti”, buscando algo de reparo del sol y un lugar donde tomarme un cafe y fumar un cigarro, me sigue por unos metros en su auto una simpática mujer que bajando su ventanilla me pregunta: – Eres Argentino?? Mi cara de asombro se iluminó y le pregunté: -Si! por que vos tambíen?? Pues no, no era Argentina pero su marido viendo la bandera en mi bicicleta le dijo que yo lo era. Su excelente español lo aprendió viviendo en España, donde curso estudios de Bellas Artes. Alina su nombre y oriunda de este mismo lugar. Hemos intercambiado algunas palabras y al preguntarle por un “Magazin Mixt” donde tomar un cafe, no titubeó ni un segundo en invitarme a su casa para tomarlo allí. He conocido a su nena, madre y marido, los cuales se han quedado un poco sorprendidos de quien era yo, a lo que Alina les respondió: – Un Turist.
El cafe fue exquisito, tanto como la corta compañía y amena charla que hemos tenido, hasta que decidiera continuar con mi viaje, también para no importunarlos vista la hora del almuerzo que se acercaba. Si lees esto Alina, te repito que fue un placer conocerlos!
Hemos coincidido con Alina, que todos los que nos vemos obligados a emigrar, por una razón o la otra, nos reconforta también volver y que el dinero (o bienestar económico que puedas alcanzar en otro país) no compensa la felicidad de estar con los tuyos.
La tarde fue un asador, mi termometro me marcaba los 30 Grados pasados y yo, con mi lado derecho de cuerpo (brazos y piernas) ya al punto de bien cocidos, mientras el lado izquierdo (brazos y piernas) aun están jugosos y mas fríos.
Debería ya pegar la vuelta???
El arribo a Alba Iulia fue una sorpresa, que encanto de ciudad. “la citadela” con sus murallas de las fortificaciones del siglo XVIII me invitaron a pasar, por su Puerta VI, V y IV. El conjunto de iglesias ortodoxas y católicas te demuestran ya la importancia también que tuvo y tiene esta sede para ambos cultos.
Aqui se encuentran la catedral de San Miguel (católica, construida en el siglo XIII en estilo gótico). En el templo descansan los restos de Juan Hunyadi y de la reina de Hungría Isabel Jagellón, polaca de nacimiento.
El Palacio Episcopal.
El palacio que alberga la sede de la Biblioteca Batthyaneum, fundada en 1784 y que contiene más de 60.000 volúmenes, entre ellos muchos manuscritos e incunables de gran valor.
La Catedral de la Reunificación (Catedrala Reîntegririi, ortodoxa) construida en 1921-1922 e inspirada en la iglesia de Târgovişte.
Aquí fue coronado Fernando I como rey de Rumanía en 1922.
La Sala de la Unión (Sala Unirii), en la que se proclamó en 1918 la unión de Transilvania al reino de Rumanía.
He aqui algunas imágenes de la ciudad:
Para terminar la tarde tuve la dicha de poder jugar algunos partidos de “Tavla” o Backgammon con Bogdan, un diseñador gráfico oriundo de esta hermosa ciudad que pese a haberme ganado me cayo muy simpático y tuvimos una buena conversación.
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